03 de abril de 2022
Ficha en la web:
Punto, puntazo el que ha sacado hoy el Cádiz en el campo de Mestalla, algo que pocas veces ha logrado el conjunto amairllo en este escenario. Un puntazo que encima viene con el añadido de haber dejado la puerta a cero, reforzando la idea de este equipo, que cada jornada va creciendo en entidad. Solo queda por saber si le dará tiempo a seguir manteniendo la cabeza a flote sobre el agua.
El encuentro de hoy, para el espectador neutral, seguramente le resultó un pestiño importante, algo que para los seguidores del Cádiz es una gran noticia. Y es que mirado sin pasión, el duelo ante el Valencia tuvo mucho combate pero poquísimo que contar en ambas áreas. Que el Cádiz tenga pocas ocasiones es lo normal y lo que toca, pero que le hagan muy poco peligro es un notición que da para soñar.
El balón iba a y venía, sí, pero en tres cuartos de campo, las luces se apagaban para ambos conjuntos. Solo podemos reseñar una ocasión por cada equipo en el primer acto, dos cabezados de los dos delanteros: el de Maxi López se fue al larguero, mientras que el de Negredo se encontró con una palomita espectacular del portero.
En la segunda parte, más de lo mismo. Mucha actitud, mucha fuerza física, pero poco argumento ofensivo. Según fueron pasando los minutos, instintivamente, los dos bandos fueron casi firmando el empate, sin querer, pero sin poder evitarlo tampoco.
Sin embargo a la contra, los visitantes tuvieron momento de asustar a la parroquia local. Especialmente sangrante fue la ocasión de Sobrino que tras ganar la espalda a sus rivales, no supo conectar el pase de la muerte para que remachara un compañero a puerta, dándole el balón a un contrario.
Dejamos para el final la enésima mención al árbitro. Y es que se le dejó de señalar un penalti al Cádiz (con lo fácil que es pitárselo en contra) por un agarrón claro de Jesús Vázque sobre Sobrino dentro del área. Una pena máxima de esas que antes pitaban los linieres (que ahora son ya decorativos) y que ahora pita el VAR, por mucho menos que esto, salvo que vistas de amarillo, debe ser.
La jornada podría haber sido redonda (tras las derrotas de Elche, Alavés y sobre todo, el Mallorca) si el Granada no hubiera conseguido en el descuento casi, empatar ante el Rayo (el equipo nazarí, sí, de penalti). Los cadistas sacan un punto más de diferencia al Mallorca, que sigue siendo muy poco (el goal-average particular es para ellos, tras el escándalo que sufrimos en Son Moix), pero que es mucho mejor que tener que remontar.
Hay que seguir, queda un mundo, queda todo.
Foto: cadizcf.com